Nunca imaginé dar clases de yoga por la compu.
Apostaría que vos tampoco imaginaste tomarlas así.
Pero acá estamos: el futuro ya llegó, y nos trajo nuevas formas de encontrarnos.
Yoga OMMLINE nace de esa alianza inesperada entre cuerpo, conciencia… y tecnología.
Una práctica real, desde un espacio virtual.
Un lugar donde el yoga se adapta a vos, a tus tiempos, a tu ritmo, a tu casa.
Creo que una de las pocas cosas buenas que nos dejó la pandemia fue esta:
una nueva amistad con las pantallas, con lo digital, con las redes que también nos pueden sostener.
Y si el contexto cambió, ¿por qué no cambiar también la forma de practicar?
No importa si estás en pijama, si no tenés mat, si tenés poco tiempo o mucho ruido alrededor.
Lo único que importa es esto:
Hacer yoga.
Nos vemos en la próxima práctica.
Bienvenida a esta experiencia.